Hace
tiempo que dejamos de llevar la cuenta de cuántos días han pasado
desde que inició la cuarentena. Lo cierto es que, en ese tiempo, no
es poca el agua que ha pasado bajo el puente y, ciertamente, lo
irregular de estas circunstancias nos ha abierto un abanico de
posibilidades, muy interesante, si
sabemos cómo aprovecharlas.
Por allí
apareció un comentario/meme en las redes afirmando que si salimos de
esta cuarentena sin un libro leído, alguna nueva idea, algún logro
personal y cosas por el estilo, entonces el problema nunca fue la
falta de tiempo sino de disciplina. Por supuesto no dejaron de
aparecer detractores de esta idea, planteando que en medio del miedo
es imposible hacer algo más que... nada y tener miedo, o que eso no
es problema de nadie si haces o no haces algo en este tiempo, que es
tú problema y no el de nadie más si lees o no tonto libro, y bueno,
estamos de acuerdo, que cada quién haga de su cuello una poesía y
de su cuerpo una canción.
Nosotros, por
nuestra parte, creemos que, efectivamente, la necesidad es la madre
del ingenio, por lo tanto en estos tiempos de dificultades es natural
que surjan ideas para resolver el día a día y no morirnos, ya
saben, un instinto básico de supervivencia. Pero esta cuarentena
también es un tiempo que nos permite dar rienda suelta a la
imaginación y plantearnos proyectos interesantes, al menos para sus
autores.
Bienvenidos a Textos de otro momento
Nos hemos tomado
el atrevimiento de abrir este pequeño espacio en la red de redes,
porque, en primer lugar, es un lugar los suficientemente amplio como
para no incomodar ni molestar a nadie con nuestras cosas y, segundo,
porque a pesar de que no molestamos a nadie sigue siendo como esa
pared pública donde colocas tu pequeño letrero de “¿Lo has
visto?” con la foto de un perro llamado Pansalao.
Todos lo ignoran, pero habrá quien lo vea y aunque sea un bigote le
pinte en la cara al perro. Entonces puedes pasar de largo sin
enterarte de nuestra existencia, pero también puedes asomarte a ver
qué tenemos para ofrecerte.
Por nuestra parte, este es un pequeño proyecto con la mira puesta
en, tal vez, convertirse en alguna antología de cuentos, pero, por
sobre todas las cosas, en el plan más eficiente para mejorar en el
noble y extraño arte de la escritura.
52 cuentos en un año
La dinámica es sencilla en planteamiento, mas no en ejecución.
Queremos escribir 52 cuentos, uno semanal. Somos dos aprendices de
escritores, por lo tanto deberá haber en esta página (dentro de,
aproximadamente, un año) un total de 104 entradas. Unos más o unos
menos, por supuesto, dependiendo de las circunstancias y los
increíblemente imprevisibles acontecimientos de 2020, lo único que
pedimos al universo, como regalo de navidad de aquí a fin de año,
es que el internet nunca deje de existir.
En fin, 52
cuentos durante un año, lo que se traduce a un cuento semanal. Este
es un interesante reto propuesto por el maestro de la ciencia
ficción, Ray Bradbury, él plantea que es imposible escribir 52
cuentos malos, uno detrás de otro y nosotros estamos dispuestos a
demostrar que está equivocado... y asumiendo que esta cuarentena se
va a extender más de lo realmente previsto, lo vemos como proyecto
muy interesante, con las miras puestas en principal objetivo de:
escribir y aprender en el proceso.
El sistema que vamos a utilizar lo sacamos de la página de
Gabriella Literaria, aquí les dejaremos el esquema de 3 semanas.
Asumimos que, quien sea que tenga la paciencia de leernos, al ver
este esquema deducirás que la semana D, es igual a la C, sólo que
cambiando las letras donde corresponde y así sucesivamente.¿Cada cuánto publicaremos?
A partir del sábado 9 de Mayo de 2020, procuraremos publicar (los
dos autores) un cuento nuevo cada sábado. Siguiendo la dinámica del
reto anteriormente mencionado. Aunque no descartaremos la posibilidad
de publicar en cualquier otro momento cualquier otra cosa que, de
pronto, tengamos la inquietud de compartir con ustedes.
Bien, de momento eso es todo. Estamos ya trabajando en función de
este pequeño proyecto, que esperamos que sea del completo agrado de
ustedes. Por favor, no dejen de dejarnos sus comentarios y opiniones,
eso podría ayudarnos enormemente a mejorar y crecer muchísimo.
Con mucho cariño,
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